La movilización será el miércoles 17 de septiembre frente al Congreso. Reclaman recomposición salarial, más presupuesto para las universidades y la derogación del veto que dejó sin efecto la ley de financiamiento educativo.
“Queremos cursar. Queremos hacerlo tranquilos y de manera presencial. Queremos seguir siendo la universidad de excelencia que somos.” Con esas frases, estudiantes de todo el país lanzaron un video en redes sociales para convocar a la Marcha Federal Universitaria que se realizará el miércoles 17 de septiembre frente al Congreso Nacional.
El mensaje busca dejar en claro que la protesta “no es contra nadie, es a favor de todos” y apunta directamente al veto de Javier Milei a la ley de financiamiento universitario. La norma había sido aprobada en Diputados con 158 votos a favor, pero quedó a un voto de la mayoría especial que la hubiera blindado frente al rechazo presidencial.
La ley vetada incluía una recomposición salarial para docentes y no docentes, golpeados por la inflación desde diciembre de 2023, y un incremento gradual del financiamiento hasta alcanzar el 1,5% del PBI. La marcha también reclamará por la ley de emergencia del Hospital Garrahan, que corrió la misma suerte y fue anulada por el Ejecutivo.
La convocatoria es amplia: estudiantes, docentes y personal de apoyo de todas las universidades nacionales —desde el norte hasta la Patagonia— se sumarán para exigir más recursos que garanticen el funcionamiento de las instituciones.
En los centros de estudiantes se repite la misma consigna: defender el orgullo de la universidad pública, el lugar donde millones de jóvenes encuentran una oportunidad de crecimiento y de ascenso social. “El Gobierno no puede desoír el reclamo de las calles ni de las urnas”, advirtieron los organizadores.
El 17 de septiembre promete ser una fecha clave: la comunidad educativa volverá a ocupar el centro de la escena con una movilización que busca frenar el ajuste y defender la educación y la salud públicas.